Test de detección de anticuerpos COVID-19
Detecta si se ha creado inmunidad frente al SARS-CoV-2 con la vacuna.
– Muestra sanguínea.
– Valora el grado de inmunidad y el riesgo de reinfección.
– Sensibilidad del 98,3% a partir de la tercera semana y del 100% a partir de la cuarta semana de haber recibido la vacunación.
La proteína S («spike»), es una proteína transmembrana que se ensambla en trímeros para formar las características espigas en la superficie de los coronavirus (mecanismo de unión del virus y las células humanas). Las vacunas contra SARS-CoV-2 inducen la producción de anticuerpos específicos contra la proteína S del virus. Se obtiene la titulación específica de los anticuerpos contra la proteína S1 de la espícula del SARS-CoV-2 (COVID-19).
Disponemos de una prueba que detecta anticuerpos frente a la proteína S del COVID19 (SARS-CoV-2) mediante el test de referencia (ELISA/Quimioluminiscencia). Aproximadamente, tras tres semanas de la última dosis de vacuna se puede detectar si se han generado estos anticuerpos frente al virus. La sensibilidad del 98,3% a partir de la tercera semana y del 100% a partir de la cuarta semana de haber recibido la vacunación.
La prueba es un inmunoensayo cuantitativo, con marcado CE, con una sensibilidad y una especificidad cercana al 100%. No obstante, el porcentaje de personas que tras la vacunación desarrollan anticuerpos contra el COVID-19 depende de la eficacia de cada vacuna.
Por ello, el resultado de esta prueba dependerá de lo indicando por el fabricante respecto a la eficacia de la vacuna que le han administrado
En la actualidad disponemos de 3 tipos de test.:
TEST GENERAL
- Valora si se está inmunizado o no.
TEST CUALITATIVO
- Valora el grado de inmunidad.
- Bajo
- Medio
- Alto
- Valora el grado de inmunidad.
TEST CUANTITATIVO
- Especifica la concentración de anticuerpos.
La prueba de serología cuantitativa post exposición al virus SARS-CoV-2 (COVID-19) se basa en la detección de anticuerpos específicos en aquellas personas que han superado la infección (de forma sintomática o asintomática) por el virus o se tiene la certeza o sospecha de haber estado expuestas a dicho virus. En general, se detectan anticuerpos a partir del 12-15 día tras la infección aunque se ha demostrado que en un bajo porcentaje de la población no se generan anticuerpos tras la exposición.
Es posible haber superado la COVID-19 sin desarrollar anticuerpos. Un pequeño porcentaje de pacientes (en torno al 2-5%) no desarrolla anticuerpos, probablemente habiendo eliminado el virus mediante una respuesta inmune celular.
Independientemente del resultado, extreme medidas de higiene y prevención del contagio (mascarilla permanente e higiene de manos).